Domingos

No es un domingo cualquiera, se que hace muy poco de la pérdida de alguien que quería muchísimo y no nos vamos a engañar le sigo queriendo y amando com a nadie en el mundo.

A veces me paro a reflexionar y pienso, ¿tan poco valía para esa persona para que rompiera todo lo que estábamos construyendo por un mensaje?, no significa que piense que valgo poco, pero si para él.

400 km siempre nos han separado pero creo que poco a poco esos 400 km se convetieron en 1000/ 2000km, y no es porque nos moviéramos del sitio, sino porque por mucho acercamiento que intentáramos siempre nos alejábamos más y más.

Se que todo no es su culpa, quizás yo también tenga algo que ver, pero cuando te encuentras en una relación a distancia, surgen problemas de confianza. Aunque nos juramos tantas tantas cosas, entre ellas que no íbamos a dejar que la otra persona se acostara enfadada nunca, que antes de tomar una decisión las cosas se iban a hablar. Comunicación, respeto, confianza,eran las bases de nuestra relación, creo que la teoría la estructuramos bien, pero algo fallo en nuestra práctica.

Se que tengo momentos, en los que me paro a pensar , que ha podido pasar para fallar en todo lo que habíamos acordado en su momento, pero almenos cuando hoy me preguntan como estoy, puedo dar una explicación sin tener que derrumbarme. Almenos hoy puedo sentir un dolor en mi interior sin que salgan las lágrimas.

Se que le he querido como a nadie, se que he estado dispuesta a perder mi juventud por alguien mucho más mayor, se que iba a estar dispuesta a no casarme, a no tener hijos aunque algún día los quisiera tener, pero estaba dispuesta a renunciar a todo por tenerlo a mi lado el poco tiempo que nos pudiese quedar.

Sigo, claro que sigo queriéndolo, mi interior lo sabe y mi exterior también, pero ahora mismo no puedo perdonar, algún día esto pasará, pero ahora mismo no puedo perdonar, y es duro, y se que lo más sensato es no guardar rencor y perdonar, pero llegados a este punto, me sigo sintiendo engañada y traicionada.

Tal vez no sea lo mejor quitar sus cosas, borrar su número y dejar de seguir en las redes sociales, pero quiero evitar caer en la tentación de escribirle, de llamarle porque por mucho que quiera hacerlo, no puedo, sigo estando decepcionada y quizás pueda decir algo que me voy a arrepentir, quizás diga algo que pueda hacer daño a otra persona, y por muy mal que se porten con uno, nunca deberíamos pagar con la misma moneda.

No estoy preparada sinceramente para descolgar un teléfono y que me den explicaciones, no las quiero, aunque se que las necesito, ahora mismo creo que lo más necesario es cerrar una etapa aunque sea para siempre. Necesito irme, abandonar todo lazo que me ataba a él, y no porque no le quiera, porque realmente le quiero con locura, pero no estoy preparada para volver a caer.

Creo que he sido tan marcada por la misma historia, una y otra vez, dicen que el ser humano es el único que tropieza 2 veces con la misma piedra, pues bueno, esta ha sido mi tercera piedra, si, como leéis 3 relaciones casi iguales, pero ¿es la que más me ha marcado?, si, creo que de lejos es la que más me ha enseñado pero la que más daño me ha echo. Debo reconocerlo, y debo reconocer que vendrán tiempos mejores, pero a la vez tengo miedo, claro que lo tengo. Tengo un miedo horrible, a ver como nuevas relaciones futuras se pueden ver marcadas por el daño que me han causado en un presente. Porque por mucho que intentemos ahogar el pasado, este siempre regresa.

La importancia de todo esto, es que aunque uno este roto, dolido y decepcionado, siempre van a llegar tiempos mejores, siempre habrá alguien que te comprenda y te ayude a levantar la cabeza.

QUIEN LUCHA, PUEDE PERDER, PERO QUIEN NO LUCHA, YA PERDIÓ.